LA HIPOCRESIA PROGRAMADA
LA HIPOCRESIA PROGRAMADA
El próximo viernes 29 viene a Valencia Luis González Reyes para
presentar el libro del que es coautor, En la Espiral de la Energía. Cuando hace dos años me uní a
Ecologistas en Acción uno de los primeros trabajos que leí se titulaba "La
quiebra del capitalismo global 2000-2030"(http://vasenbachoqueta.blogspot.com.es/2014/04/masa-critica.html ) de nuestro compañero Ramón Fernández
Duran, el comienzo inacabado, por su triste desaparición, de esta obra maestra, cuyo testigo recogio tan fielmente Luis .Me impactó de tal forma que ya no pude dejar esta línea de pensamiento, quizás
para muchos alarmista. Nada más lejos de la realidad que terminara por
golpearnos a todos donde más duele, Dos volúmenes para narrar "formas de habitar, económicas,
sistemas políticos, tipos de trabajo, demografía, luchas sociales, maneras de relacionarse
con el entorno...y sobre todo ¿cuál va a ser la evolución futura? .Este
próximo invierno se reunirán los principales dirigentes mundiales en Paris en
la cumbre sobre el clima Parece que después de muchos años de
negacionismo pretenden que demos el paso a la aceptación sin más ,sin entrar a
penas en detalle; si claro la acumulación de CO2, el deshielo, la
desertificación... de eso oímos todos los días un poquito, como parte de la
aceptación. No creo que lleguemos a oír nada relativo al funcionamiento del
sistema económico capitalista, y ni muchísimo menos a la parte del consumismo
voraz que siguen pretendiendo inculcarnos para que la maquinaria siga funcionando.
Sin ir más lejos hace unos días, nuestro gobierno aprobó un paquete de medidas
para la financiación de la compra de vehículos nuevos, ¿porque? ¿Porque en los
mismos noticieros tras una leve noticia sobre las injusticias sociales, o los
desastres medioambientales que se reproducen en todo el Planeta, aparece
una sobre la moda en Paris o el salón del automóvil? y me diréis, fácil no veas la tele. Bien, es una
buena solución ¿y el resto? Pues nada que lo acepten sin mas, y con ello
los transgénicos, las arenas asfálticas, la privatización de acuíferos, el
fracking , la acumulación de tierras... y algo mas… algo absolutamente
aberrante ,la huida de cientos de miles de personas, despojadas de toda esperanza,
por motivos que están muy relacionados con nuestra insostenible forma de
vida diaria aquí, a este lado del hemisferio, ya no buscando un porvenir mejor,
simplemente huyendo del sin futuro; y a los que sin mas les cerramos las
puertas. Y el problema para “nuestra sociedad” reside en cuanto dinero tenemos
que poner sobre la mesa para llenar las fronteras de alambradas con concertinas,
los mares de patrulleras, los cielos de drones para evitar que lleguen o
como nos repartimos a quienes logran llegar (¿os imagináis que os repartieran,
os lo podéis imaginar?)¿Estaremos con ello aceptando la total exclusión de
miles de millones de personas como nosotros?, CON LOS MISMOS SENTIMIENTOS
¿Estamos empezando a aceptar así el llamado Ecofascismo?
Resulta imposible ser franco ignorando que cada gesto, cada
actitud de nuestra vida, repercute en este absurdo mundo global que hemos
fabricado entre todos, y no es remedio pensar que vendrán otros con nuevas
intenciones y lo parchearan, y digo parchearan porque ya nadie cree que esto
tenga solución, y esta es la aceptación o la HIPOCRESIA PROGRAMADA.
Nuestra OBLIGACION como conocedores del problema ya no puede ser
solo denunciar, debemos EDUCAR y ofrecer alternativas. Hace unos días en la presentación del libro de Julio García
Camarero, El Decrecimiento Infeliz
debatíamos sobre la connotación negativa de la palabra decrecimiento, nuestros
interlocutores argumentaban que desde luego no era nada inspiradora.
Nuestra mentalidad desde la infancia programada en la competitividad y el
consumismo, no está preparada para asumir semejante cambio, sin embargo
para los que de verdad creemos en el significado de mejor con menos, para los
que comprendemos el buen vivir, el concepto de necesidades y satisfactores,
para los que creemos que hay una pequeña posibilidad de transitar, la palabra decrecimiento
no nos asusta de al revés nos anima y nos induce a actuar cada vez un paso mas allá.
SALUD Y A TRANSITAR
Cesar Perez
Ecologistas en Accion Valencia
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